La tradicional celebración que se da junto a la llegada del invierno, arrancó bajo un manto de niebla y llovizna, que no apagó el furor ni las ganas.
Música en vivo, danza, intervenciones artísticas, actividades lúdicas, visitas guiadas, patio gastronómico y feria de diseño, fueron las actividades desarrolladas en la Fiesta de San Juan, una idea lúdica y original, con una cuidada y delicada estética, pensada en cada detalle.
Dicen que el mal tiempo no apaga los buenos deseos. En esta ocasión, los conjuramos y les pusimos fuego y luz.
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